sábado, 31 de agosto de 2013

CUANDO SAKIRA ERA SAKIRA

Como buen sábado por la tarde, estoy tirada en el sofá de casa. Siguiendo de reojo una peli en algún canal de la tele, con Lady Gaga sonando de fondo en una página de internet y mientras escribo esta entrada. También sigo una media conversación por Line, con arrobita que no sabe si salir a servir o poner criada.

Qué quereis sois mujer, puedo hacer muchas cosas a la vez.

En la página anteriormente mencionada, hacen una referencia a los inicios de Sakira, cuando estaba más "carnosa", hablaba castellano y los mariachis poblaban sus actuaciones. Dicen, de Sakira, que era esa época en la que molaba. Y no sólo se dedicaba a adelgazar y hacer dinero en el mundo anglosajón -y, por extensión, en el resto del mundo.

Y, claro, como tenemos tanto en común Sakira y yo, me he preguntado qué es lo mejor: mantenernos fieles a nuestros orígenes o dejarlos atrás. Si es mejor tener unas señas de identidad inamovibles o dejar que la piel nos cambie, como les pasa a las serpientes. Evolucionar o morir.

La verdad es que ni lo uno ni lo otro. Porque si no evolucionas, si no avanzas, puede que sólo signifique que no has aprendido nada, que no has crecido. Pero, si cambias demasiado, puede ser que signifique que eres de carácter débil y que te dejas llevar por los aires externos.

Así que me he puesto en plan examen de conciencia. Por ejemplo, evaluar cómo era hace diez años contra cómo soy el día de hoy...

Pero, ya os dije que estoy tirada en el sofá, atendiendo a varias cosas a la vez. Así que... Dejaremos el examen de conciencia para Semana Santa. Me voy a ser un poco superficial y comprar unas cosillas.



4 comentarios:

cereza dijo...

Vaya ahora tengo que reflexionar sobre si has cambiado mucho en los últimos diez años. ;)))

En mi caso, el cambio ha sido sutil pero sin pausas y sintiendo que soy la misma, soy mejor.
Ale, que estoy contenta conmigo.

Olga dijo...

Uyyyy, no se sí esté blog te puede facilitar información suficiente para valorar mi evolución. Pero, ya te lo digo yo: he cambiado. Y siento que a mejor.
Me alegro por tu camino andado.

solo lo fragil dijo...

mmmmm.... se trata de una eterna reflexión,pues a mi parecer abarca otras dentro de la misma como la de :¿Cambia la gente?A mi me gusta pensar que la gente aprende, evolucion y de paso mejora (por que si cambias a peor no es una evolución) pero por otro lado en esencia somos siempre los mismos(?) Secomportará Shakira de lamismamanera en su casa con todos esos dolares de más y kilos de menos?
Se alo que sea, creo que lo importante es nunca perder nuestros origenes, saber avanzar hacia donde vamos y sin olvidar de donde venimos.
A mi me recorre un gusanillo cada vez que vuelvo al barrio donde me crié ; es una sensación de melancolía pegajosa, que en un principio no me gusta, pero luego la siento importante, son mis raíces que claman y gritan cuando huelen la tierra donde se hicieron fuertes...y apuesto que hasta a la nueva Shakira le ocurre si esque alguna vez ya viaja a Colombia...

Olga dijo...

solo lo fragil, gracias por contarnos tu opinión.
Supongo que se trata de madurar, mejorar sin perder nuestra esencia. Presuponiendo que nuestra "esencia" es buena.
Sino, mejor borrón y cuenta nueva.
En el caso de la muchacha en cuestión, seguramente habrá que diferenciar entre los vaivenes públicos y su evolución como persona. Pues son cosas que no siempre van de la mano. Un personaje, una historia musical...
Yo me quedo con mi profesión y ella con la suya.