lunes, 26 de diciembre de 2011

MUDANZAS VARIAS


La verdad es que una mudanza es una bonita forma de complicarse la vida. Tras unos lustros en un domicilio, independientemente de la cantidad de metros útiles de que disponga, descubres tu gran capacidad para rellenar todos los huequitos posibles. 


¡Por Dios! ¿De dónde salen tantas cosas? Yo creo que procrean cuando yo no estoy en casa. Otra explicación es imposible. Si hay cosas que ni sabía que teníamos. ¿A ver si es que nos las prestaron y no las devolví? No, no, que yo soy muy cumplida.

El caso es que, hasta que encuentren el sitio a ellas destinado en la nueva casa, tienes que sortear montoncitos de resistencia. Cajas, bolsas que se colocan de manera artística o estratégica en tu camino. Y no se cuánto tardaré en volver a localizar ciertas cosas que ya están en la nueva casa (o eso espero).
No se cómo lo hacemos, pero en las mudanzas siempre desaparece algo. Al menos en las que yo he podido participar. Unas fotos, una camiseta, calcetines, algún documento, etc. Cosas de las que nunca más se supo. Aunque jures y perjures que si que lo guardaste en una caja que vino al nuevo lugar.
Algunas veces, pasa igual con las amistades. No sabes muy bien el motivo, pero te mudas y desaparecen. La distancia se vuelve insalvable. Es como si dejaras lo lazos en el viejo domicilio.

Claro que también aparecen nuevas cosas. Nuevas amistades, nuevas calles por recorrer, tiendas que descubrir, bares que probar. Caminas y descubres que tu vida se ha poblado de aromas nuevos, de sutiles cambios según la hora. No sólo cambian los grados que te acompañan (en mi caso si, que me subí a la sierra), cambia hasta tu manera de percibirlos. 

Un cambio importante, pero positivo y necesario.


3 comentarios:

Ra dijo...

Positivo, quédate con esa palabra.
Suerte y mucho Amor en la nueva andadura!!!

Olga dijo...

Gracias corazón.
Espero que el 2012 mejore, porque no empezó bien del todo. Bueno, según se mire. Arrobita tuvo un accidente de moto. Pero salió casi-casi-ilesa. Es decir, con magulladuras, rigideces, golpes y una escayolita en la mano derecha.
Pero, que todos los males sean esos.
Un besote.

Ra dijo...

Que todo quede en eso sí.
A cuidarse!!!