jueves, 8 de marzo de 2012

DÍA DE LA MUJER, DEL GAY, DE LA ENFERMEDAD RARA...

Antiguamente todos los días había un santo que honrar. Cada día se recordaba uno y, algunos aprovechados, lo utilizaban para nombrar al descendiente (¡cuánto trauma ha generado esta costumbre!).
Con tantos siglos de catolicismo, nos empezaron a faltar días y amontonamos santos todos y cada uno de los días del año. Siendo algunos días realmente prolijos.

Con el distanciamiento religioso, también fuimos olvidando los santos. Ya nadie se acuerda de  Santa Radegunda reina, San Raimundo de Fitero, Santa Clara o  San Crispín de Écija. 

Hoy no celebramos santos... Celebramos todo lo demás. Que si día de la mujer, que si día del niño, del orgullo gay, de la bicicleta, etc.

Y nos está pasando como con los santos, que tanta celebración no cabe en un año. Y vamos amontonando celebraciones. Así hoy, además del día de la mujer, es el día del riñón, dentro del año del envejecimiento activo.

Pero ¿Para qué tanta celebración? 
Muchas son las voces que dicen que no hace falta un día del Orgullo Gay.
Muchos y muchas opinan que si no hay día del hombre trabajador, no debería haber día de la mujer trabajadora.
Dentro de nada los moteros dirán que si no hay día de la moto, para qué el de la bicicleta.

Por favor, señores y señoras haya paz. Todo tiene su sentido. Ya nos gustaría decir que no tiene sentido. Pero no es así. 
  • Día de la mujer trabajadora, pues si. Porque las desigualdades están a la orden del día. Porque el mismo trabajo no genera igual salario. Porque si progresa él puede decirse que es un cabrón, un trepa, un pelota.... Pero si progresa ella, se hace desprecio diciendo que se acostó con alguien. Y yo creo que no es lo mismo.
  • Día del Orgullo Gay. Si. Porque todavía apalean a gays. Todavía no se suicidan adolescentes porque les llamen ¿Les llamen? ¿Sabe alguien como se nombra despectivamente a un chaval heterosexual?... tic, tac, tic, tac.... Pues eso.
  • Día del hambre, porque somos unos desgraciados que todavía permitimos que la gente muera de hambre.

Día-de-lo-que-sea mientras ese "lo-que-sea" sufra desingualdad, violencia, miedo, peligro, etc.




2 comentarios:

anler7 dijo...

Hola Olga!
Veo innecesario alguno, por ejemplo el de hoy, dia de la mujer trabajadora? celebrar algo que debe ser natural a estas alturas... no supone eso seguir atrasandose o favorecer la desigualdad? Porque donde esta el dia del hombre trabajador?
Mismo ejemplo para el dia del orgullo...

La victoria seria no tener que poner un dia para celebrarlo porque ya estamos acostumbrados a ello.

Para los otros ejemplos que has puesto como el dia de las enfermedades raras o el dia de los donantes de organos, hay causas que no esta de mal ser recordadas, no solo un dia sino todo un año

Es mi sincera opinion jeje

Un placer leerte tambien por aqui!
Un abrazo!

Olga dijo...

Comparto, en parte, tus palabras.
Desgraciadamente, creo que se malinterpreta alguno de esos días.

El día del orgullo gay, va más allá de pasar un calor horroroso brincando tras unos chulazos. Porque yo voy en esa multitud también. Porque como yo hay muchos. Y hay que dar visibilidad, para que el que se siente sólo, raro, diferente, vea que no es así. Porque Madrid no es lo mismo que Villamil de Abajo. Para que pierda sentido un barrio como chueca y no me echen de un bar de Huertas, por besar a mi chica. ¿A cuántos heteros insultan en el metro por darse un pico?

Si no das guerra, no hacen foco sobre el tema.

El día de la mujer trabajadora, creo que habría que redefinirlo. Pero el problema sigue existiendo, la desigualdad.
Un día como hoy puede servir para recalcar temas, hacer conferencias, pelis o lo que quieras, para presionar...

Y lo de recordar que hay que recordar todos los días del año es pura demagogia. ¿Cuántos donan al día -el resto del año- para investigar sobre la leucodistrofia metacromática que se llevó a dos pacientes míos? Pero se hace un día, se da un par de páginas... Y la gente dona unos miles de euros... Y un laboratorio puede continuar un poco más.

Me alegró verte por aquí. Eres bien recibida. Aunque no tenga un día fijo para celebrarlo, jejeje.