NOSTALGIA

Hace un par de días, Ana Torroja, presentaba su nueva gira. Y yo escuchaba la entrevista por la radio mientras conducía. 

Y encontré en sus respuestas la palabra que me faltaba. Bueno, me faltan muchas, muchas en general y de las que me describen en particular. Algunas veces necesitas definir lo que sientes, para sentir que es algo que existe, que no te inventas. O lo contrario, encuentras la palabra de algo de lo que careces. No es en si ni bueno ni malo. Sólo que no lo tienes.

Y esa palabra es "Nostalgia". Y designa algo de lo que carezco. No soy nada nostálgica. Y no encontraba palabra para ese sentimiento ausente en mi. Y me generaba una pequeña desazón. Tranquilas no me quitaba el sueño (que para eso ya está mi amada Neska, a ver si duerme de un tirón la jodía).

No tengo especial interés en regodearme en imágenes de mi infancia, en la casa donde me crié o las horas de colegio. No tengo cariño por los buenos momentos que pude pasar en relaciones anteriores. No creo que sirva para mucho, la verdad. Principalmente porque esas relaciones terminaron -mejor o peor, pero terminaron-.

Y, yendo un poco más, tampoco siento gran apego a los lugares donde vivo. Me gustan, los disfruto. Busco lo bueno de cada lugar y trato de "regodearme" en ello. Y evito centrarme en los aspectos negativos que todo tiene. No ignoro esos puntos negros de cada cosa, pero tampoco hace falta tenerlo grabado en el cristal de mis gafas.

Es más, olvido las cosas con facilidad. Creo que reseteo el cerebro, para hacer hueco a otro montón de cosas nuevas. Paisajes, miradas, besos, situaciones, películas, libros, proyectos, etc. Lo que vivo y lo que proyecto me interesa más.